Las perturbaciones suelen ser pensamientos que nos paralizan alimentados por nuestros peores demonios. Cuando nos quedamos atrapados en nuestros pensamientos aparece la perturbación que no nos permite ser ni estar en el momento presente, encontrar la calma.
No podemos avanzar si estamos constantemente analizando nuestras vidas con el afán de encontrar la información que justifique nuestras peores pesadillas, lo que más rechazo dentro de mi. Nuestra estructura de a personaidad se construye con a creencia e que podemos controlar nuestras vida para no sentir e dolor de ver que ocurre y no podemos acer nada para detenerlo. Aparece entonces una sensación descontrol dentro de nosotros haciéndonos reaccionar con resentimiento y violencia hacia los demás.
Hemos aprendido que nuestro dolor es un secreto que debemos guardar y proteger, como todos los secretos para evitar traicionarlo este debe permanecer oculto en nuestras memorias, creemos que así ocultándolo estamos seguros pero contrariamente nos están separando de la realidad, de nuestra esencia, de nuestra verdad y de nosotros mismos.
Para encontrar ese lugar íntegro, sano y libre es necesario revisar nuestros miedos, nuestra historia y atrevernos a expresarlas con el poder de la narrativa. Si les damos voz a nuestro dolor, lo estamos soltando.
La clave está en no rendirse y en aprender que cuando soltamos el lastre de nuestras profundas heridas estamos haciendo frente a nuestros peores demonios. Separar lo tóxico de lo sano de lo que ya no tiene vida ni futuro. La vida tiende a reorganizar y sellar las fracturas para que podamos saltar hacia lo nuevo. Para conectar con tu poder personal hay aprender caer en el vacío y soltar los apegos externos que tienes con la vida, el dinero, tu familia, tus objetos que no te permiten ser quien eres en esencia.
Alineados con nuestro sentido de identidad aparece una energía de compasión hacia nosotros mismos para escuchar a nuestro corazón, soltar y ver con compasión nuestra vulnerabilidad debajo de la resistencia y el enojo.
Cuando soltamos, renacemos de nuestras cenizas cuál Ave Fénix en momentos de rupturas internas irrevocables, empezamos una nueva vida e iniciamos un nuevo ciclo,Momentos de transición de una etapa a otra . Damos un salto cuántico. Estamos viviendo una profunda transformación enfrentándonos a nuestros demonios internos, soltando aquello que ya no me aporta, yo con conciencia doy un salto de libertad y veo lo que me limita y voy a saltar hacia el cambio.
No te rindas, cada día es un nuevo comienzo, porqué hoy es la hora y el mejor momentopara soltar, porqué tienes alas y puedes hacerlo, porqué no estás solo y porqué yo te apoyaré vayas donde vayas.